Carmen Enguita

La loba viste de seda

Proyectos a Medida para Diosas como tú

Conocí a Carmen en tiempos de encierro, por medio de las redes sociales, en unos momentos en los que parar me hizo buscar respuestas.

Me encantó su mensaje directo y claro a las mujeres con más de 40.

Reconectarse, volver a casa, amarse, cuidarse, reir, amar sus cuerpos…

Merecer ser feliz y dejar de ver arrugas e imperfecciones y quererse mas.

Estoy en ese momento vital de cambios físicos y mentales y lo sentí cercano.

Conozco demasiadas mujeres a mi alrededor que se abandonan a partir de los 50.
Que no se miran en los espejos, que no se regalan placer…

Carmen para mi es el símbolo de mujer viva con ojos brillantes que vive la vida de forma libre y auténtica, ese espejo en el que mirarse, esa guía con la que aprender.

Por eso, le propuse crear para ella, para esa mujer que nos gustaría ser.

Crear una especie de capa chamánica que la represente y le haga sentirse una diosa al vestirla, una superwoman en los momentos más especiales, cuando enseña a otras mujeres o hace sus ceremonias, o simplemente cuando le apetezca sentirse ella misma.

Estuvimos escribiéndonos y hablando mucho y cuando tuve conceptos, palabras, colores… entonces hice unos bocetos que le mostré y cuando le pareció acertado, entonces, me puse a pintar.

Creé dos chales diferentes

El frontal, con tonos cálidos, naranjas, rosas, lilas, beig, así como un atardecer, vacío espacio para lo que llegue, paz, calma..

Y creé un símbolo sobre el corazón, para simbolizar “pezones contentos, corazón contento, sabiduria“.

El trasero, con tonos frios, azules, grises y contrastes. Abajo con flores en amarillos y rosas.

Nocturna, mujer que corre con lobos, agua que limpia, floreciendo.

Cada chal tiene un sistema de uniones que permite transformarlos de forma independiente en boleros o entre si en una túnica.

Hicimos una sesión de fotos en su casa y otra en exteriores, en uno de sus sitios favoritos: el pantano de San Juan, en Madrid.

Se convirtió en su segunda piel, la seda suave y ligera, bailó con ella, giró, se bañó y adquirió el sentido para el que fué creada.

Sensual, bella, la seda y Carmen se fundieron en un abrazo y fueron una sola.

Fué mágico, podéis verlo en las maravillosas fotos a cargo de Carmen Romo.

¿Quieres que cree uno para ti?

Pueden usarse como chal, chaqueta o túnica, si utilizas dos. Puedes encargar uno ó dos.

El sistema de trabajo es: